De compras cercanas

Los sábados son los días que dedico a realizar la compra semanal. Una cita en la que tengo parada obligada en la pescadería de Javi. Después de probar en diferentes establecimientos, he conseguido llegar a una pescadería en la que no sólo encuentro buenos productos que parecen querer saltar del mostrados a nuestra bolsa, sino que también conversación y consejos para elaborar la merluza, el rape o el bacalao fresco de formas distintas a las habituales. Es de agradecer que cuando acudes a un pequeño establecimiento, el cliente encuentre alicientes que le distingan de las grandes superficies, más frías y distantes por propia concepción.
El trato cercano, diario o semanal, con el cliente hace que el pequeño comercio siga siendo un refugio no sólo para las relaciones humanas más directas, sino también para encontrar esos productos de primera calidad en los que podemos confiar porque sabemos que son elegidos de forma cuidadosa.